Estuvimos viendo una película por cable, se llama “En sus Zapatos”, donde unos novios reciben como regalo de bodas un poema de E. E. Cummings. Al escucharlo nos llenamos de mucha ternura por que cada palabra dejaba traslucir todo el amor que puede sentir una persona por otra. Queremos compartirlo con ustedes:
Llevo tu corazón conmigo (lo llevo en mi corazón)
nunca estoy sin él (tú vas dondequiera que yo voy, amor mío;
y todo lo que hago por mi mismo lo haces tú también, amada mía).
No le temo al destino (pues tú eres mi destino, mi amor)
no deseo ningún mundo (pues hermosa, tú eres mi mundo, mi verdad)
y tú eres todo lo que una luna siempre ha sido,
y todo lo que un sol cantará siempre, eres tú.
He aquí el más profundo secreto que nadie conoce
(he aquí la raíz de la raíz y el brote del brote
y el cielo del cielo de un árbol llamado vida;
que crece más alto de lo que un alma puede esperar o la mente puede ocultar)
y ésta es la maravilla que mantiene a las estrellas separadas.
Llevo tu corazón (lo llevo en mi corazón).
nunca estoy sin él (tú vas dondequiera que yo voy, amor mío;
y todo lo que hago por mi mismo lo haces tú también, amada mía).
No le temo al destino (pues tú eres mi destino, mi amor)
no deseo ningún mundo (pues hermosa, tú eres mi mundo, mi verdad)
y tú eres todo lo que una luna siempre ha sido,
y todo lo que un sol cantará siempre, eres tú.
He aquí el más profundo secreto que nadie conoce
(he aquí la raíz de la raíz y el brote del brote
y el cielo del cielo de un árbol llamado vida;
que crece más alto de lo que un alma puede esperar o la mente puede ocultar)
y ésta es la maravilla que mantiene a las estrellas separadas.
Llevo tu corazón (lo llevo en mi corazón).